viernes, 30 de agosto de 2013

El automóvil de oro

El estilo de Pacindo
Una historia singular! El reto es apoderarse de un valiosísimo auto fabricado con placas de oro, partes de platino y abundantes piedras preciosas. El diseño del auto era claramente un modelo italiano. Este derroche fue ordenado por el emir Said Al Ahmad, quien estaba de visita en París con su mujer favorita, Samira. El golpe se realiza de una forma muy imaginativa, que me hace recordar algún episodio de la serie de televisión Misión Imposible, je.
El emir Said y Samira
No se da crédito al argumentista, pero este episodio fue de los pocos que dibujó Pacindo, dibujante michoacano, quien trabajó en Novaro en la misma época de Víctor Cruz. De hecho este último fue quien me informó sobre quién dibujó este episodio. Otra historia realizada por Pacindo fue "Al rescate de la tía Simone", de 1973.

Que ustedes lo disfruten!

-Luis Van



Créditos del episodio
Título: "El automóvil de oro"
No.: 2-343
Fecha de publicación: 12 de febrero de 1978
Serie: Aguila
Editorial: Novaro
Argumento: Sin datos
Dibujo: José Trinidad Pacindo López
Páginas: 36, con cubiertas.
Digitalizado por: Luis_Van

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2 comentarios:

Batumix Deviant dijo...

Gracias Luis Van por otro gran numero de Fantomas, por alguna razon a pesar de que me gustan las sagas largas de este gran personaje, sus historias unitarias si que llegaban a ser imaginativas y de todo genero, desde ´robots vampiros´ a ´monjitas de la caridad espaciales´ realmente un encanto que se perdió un poco con las sagas mas largas, solo el aspecto de "que podria pasar o que genero vendra en el siguiente numero"


Gracias.

Luis Van dijo...

De nada, Batumix. Comprendo tu punto de vista, ya que en lo personal siempre me gustaron más las historias de uno, dos o tres capítulos. Las series largas en ocasiones no agregaban valor a la historia principal. Sin embargo, a veces las historias unitarias como las llamas terminaban muy de repente siento yo que por falta de espacio, y en esos casos ameritaban una continuación. Este es el caso de la célebre historia de "La inteligencia en llamas", -la cual compartiré próximamente- en la que una excelente narrativa tuvo que resolverse en la última página. En cambio, excelentes historias se desarrollaron perfectamente en dos capítulos, como "Las cibernéticas", "El emperador de las tinieblas", "Cuando Fantomas se volvió niño", etc.
Saludos y como siempre, gracias por tu visita!
Luis Van